Viajar en colectivo sigue siendo una opción que combina economía y encanto, según destacó Ariel Rearte en una entrevista reciente en Buen Día Día. «Tiene su magia, especialmente cuando se viaja acompañado», mencionó, subrayando el atractivo de recorrer largas distancias por tierra. Este medio de transporte, además de ser más accesible económicamente, mantiene un movimiento constante hacia ciudades cercanas, mientras que hacia la cordillera se incrementa significativamente durante los fines de semana largos y fiestas populares.
Este incremento no solo beneficia a los pasajeros, sino también a la Terminal de Ómnibus, que percibe una tasa municipal por cada ticket vendido. «Es un impacto positivo para todos, desde el concesionario hasta los pequeños comercios de la terminal, como el kiosco, que ven un aumento en su actividad», explicó el Rearte.
Otro punto destacado en la charla fue la readecuación de espacios dentro de la terminal. Actualmente, el primer piso del edificio está siendo transformado para alojar una central de monitoreo municipal. Este espacio permitirá controlar bienes municipales, trasladando allí las funciones de la central actualmente ubicada en Brown y 25 de Mayo.
La iniciativa, además de mejorar la gestión municipal, busca optimizar el uso de las instalaciones y adaptarlas a nuevas necesidades.
La Terminal de Ómnibus se reafirma como un lugar estratégico, no solo por su rol en la movilidad de las personas, sino también como un espacio de dinamismo económico y renovación urbana.