El Club de Náutica y Pesca Comandante Espora celebró sus 80 años con una velada inolvidable de embarcaciones iluminadas, destacando la unión comunitaria, la creatividad y el amor por el mar.
Un espectáculo de luces y creatividad
La costanera local fue el escenario de una noche única organizada por el Club de Náutica y Pesca Comandante Espora para celebrar sus 80 años de historia. El evento contó con la participación de los clubes Náutico Rada Tilly y Náutico YPF de Km. 3, y transformó el mar nocturno en un espectáculo de luces y colaboración. Desde un robot bailarín que abrió la velada hasta las creativas decoraciones de las embarcaciones, la actividad combinó deporte, arte y comunidad en una experiencia inolvidable.
Una competencia fuera de lo común
La actividad reunió a participantes de todas las edades, desde niños de 7 años hasta adultos, divididos en las categorías de vela (optimist y laser) y embarcaciones a motor. Incluso un kayak decorado de manera innovadora obtuvo una mención especial. Los propios participantes evaluaron las embarcaciones bajo criterios que iban más allá de la estética, como el diseño, la complejidad de la iluminación y la colaboración entre equipos, destacando la importancia del trabajo en equipo.
El papel fundamental de los instructores
Los instructores de la escuela de vela desempeñaron un rol crucial, garantizando la seguridad y motivando a los navegantes a superar sus propios límites. Además de supervisar el cumplimiento de la normativa náutica, inspiraron a los participantes a vivir una experiencia significativa, consolidando la formación integral que caracteriza al club.
Pizzas caseras y espíritu comunitario
Mientras los navegantes deslumbraban en el agua, las familias en tierra preparaban pizzas caseras para recibirlos al regresar. Este gesto reflejó el espíritu comunitario que define al club, donde cada integrante, desde los deportistas hasta los familiares, tiene un papel fundamental en el éxito de las actividades.
Un legado para el futuro
Más que un simple evento, esta velada reafirmó los valores del Club Comandante Espora: colaboración, respeto y pasión por el mar. La actividad busca consolidarse como un referente en la ciudad, demostrando que el deporte puede ser un motor de integración, innovación y cultura. A sus 80 años, el club sigue navegando con la misma energía que lo vio nacer, construyendo lazos que perdurarán por generaciones.