En una entrevista con Radio Giros, el ministro de Hidrocarburos de Chubut, Federico Ponce, compartió detalles del ambicioso proyecto de explotación de gas no convencional en el yacimiento Río Chico, impulsado por Pan American Energy. La iniciativa contempla una inversión inicial de 250 millones de dólares, la extensión del contrato de concesión por diez años, y podría significar un importante impulso para la economía local.
El proyecto comenzó con un pozo piloto, que incluyó una perforación vertical y una horizontal. Este estudio preliminar ya permitió la extracción de gas húmedo —con presencia de condensados líquidos— y abrió la puerta a determinar no solo la cantidad, sino también el tipo de hidrocarburo presente. A futuro, se perforarán cuatro pozos más para consolidar la estimación de reservas.
Uno de los grandes atractivos de esta iniciativa es su potencial exportador. El gas húmedo se valora más en el mercado internacional gracias a sus líquidos asociados, que se cotizan a precios similares al petróleo. Además, la infraestructura existente —como el gasoducto San Martín— permite una conexión directa hacia el norte del país y eventualmente hacia mercados globales a través de terminales cercanas como Punta Colorada.
Ponce destacó que, a diferencia de otras regiones como Palermo Aike, este yacimiento tiene la ventaja clave de la cercanía a las vías de transporte. Esto reduce costos logísticos y facilita la salida del recurso, consolidando a Comodoro Rivadavia como un polo estratégico dentro del esquema energético nacional.
La propuesta también contempla un fuerte componente social: la contratación de mano de obra y proveedores locales, becas para capacitación y mecanismos de financiamiento para pequeñas empresas. Este compromiso quedó sellado en el acuerdo con la provincia y será acompañado por la legislatura.
Finalmente, el ministro explicó que el agua utilizada para la fractura hidráulica proviene de la formación, es decir, agua salada no apta para el consumo humano, lo que representa un uso responsable del recurso hídrico. En cuanto a los plazos, el plan piloto durará hasta cinco años, dependiendo de la disponibilidad de equipos y resultados de las perforaciones.
Este anuncio devuelve el optimismo a una región golpeada por la caída del petróleo convencional, con la esperanza de que el gas no convencional abra una nueva etapa de desarrollo y empleo en la Cuenca del Golfo San Jorge.